Cuba
¿Qué nos dicen las proyecciones demográficas para Cuba?
El objetivo de este artículo es sintetizar los resultados fundamentales del análisis de una serie de cuatro proyecciones demográficas para Cuba, elaboradas para satisfacer oportunamente los requerimientos de información sobre las futuras características de la población y los hogares, entre ellas el tamaño, la composición y estructura por sexo y edad, la distribución por zonas urbana y rural y la población económicamente activa, en los diferentes niveles territoriales.
Cuba’s convertible currency debt problem
In the decade of the 1980s, Cuba has confronted a worsening debt problem in terms of convertible currency and in the context of its participation in the world economy. Before 1985, the debt problem appeared to be manageable, indeed it did not seem to be seriously damaging to Cuba’s macroeconomic growth performance, which was strong from 1981 to 1985 in contrast to most other developing country debtors, which underwent profound economic contraction in this period.
The dual currency bifurcation of Cuba’s economy in the 1990s: Causes, consequences and cures
In the 1990s, there has been a growing split in Cuba’s economy between the traditional socialist peso-based component and the internationalized dollar-oriented and marketized component. This schism has been caused by a conjuncture of circumstances, including the expansion of tourism and foreign and mixed enterprise; the contraction and loss of confidence in the socialist economy; the weakening of the monetary role of the peso (owing to the rapid inflation arising from the financing of the fiscal deficit through money creation), and a grossly overvalued exchange rate. This dual currency and structural bifurcation of the economy shaped the pattern of income distribution, thereby influencing the economic behaviour of the Cuban people.
The Cuban economy
At the end of the 1950s, Cuba’s economic structure was marked by serious technological lags and insufficient industrial development. The growth rates of production and investment were low, while income distribution displayed a notable bias towards concentration. Over the period from 1959 to 1989, the product grew at an average rate of around 4% per year and economic policy gave the State a leading role in the production of goods and services, with a marked predominance of planning over the market mechanisms in the regulation of economic activity.
The tax regime for micro-enterprises in Cuba
The government of Cuba established a tax regime for micro-enterprises as soon as it legalized the sector in 1993. It was designed to function in a difficult context in which a tax-paying culture did not exist, in which widespread noncompliance was feared, and in which some micro-entrepreneurs’ incomes were high. The tax regime included advance monthly lump-sum payments, a 10% maximum amount of total revenues which could be deducted as costs in calculating taxable income, and an escalating tax schedule. This tax regime has a number of weaknesses which make it inequitable, inefficient and ineffective in revenue generation. The analysis of this essay indicates that the actual incidence of the tax is higher than the official tax scale when actual production costs exceed the maximum allowable 10%, even exceeding 100% in some circumstances. The up-front lumpsum tax payments result in marginal tax rates of 100% for initial levels of revenue, followed by a rate of 0% until a level of taxable income is reached where taxes payable according to the tax scale are equal to the initial lump-sum payment. The tax regime discriminates against micro-enterprises which have costs of purchased inputs in excess of 10% of gross revenues. It is regressive in that the tax rates are higher for lower-income micro-enterprises up to a fairly significant level of true net income. The micro-enterprise sector also faces a more onerous tax regime than the foreign and joint venture sector of the economy. From the standpoint of its impact on the efficiency of resource use, the tax regime restricts the entry of new firms into the sector and forces some out of business or underground, thereby reducing production, raising prices, reducing employment and reducing the generation of income. Finally, to the extent that firms “go underground,” refrain from starting up, go out of business, or evade taxes, the government loses revenue. A number of modifications in the tax regime are suggested in order to overcome its weaknesses. These changes could help the sector to make a more valuable contribution to Cuba in terms of employment and income generation, increased production at lower real costs and prices, and increased tax collection.
Trade-growth relationship in Cuba: Estimation using the Kalman filter
In this article, time-varying coefficients are used to estimate the balance of payments constrained growth (BPCG) model for Cuba. Exports are considered to have been a decisive factor in Cuba’s recovery following the crisis. Also, there was an estimated increase in income elasticity of demand for imports in the early 1990s and between 2003 and 2005, indicating a decrease in import substitution. The conclusion is that, given the rapid rise in the export of services, there are now better growth prospects for the Cuban economy. However, prospects could be better and would benefit a larger share of the economy if import substitution were also made more efficient and other export sectors with a greater multiplier effect were expanded.
Structural constraints and determinants of economic growth in Cuba
This study attempts to analyse the growth of Cuba’s production sector and to identify the main determinants and constraints that existed during a period when tighter restrictions on trade and financial activity forced the country to reorient its economic model and its position in the world economy. This analysis includes an exploration of the institutional dimension of the gross domestic product (gdp). The model, variables and methodology used for this purpose have all been adapted to the particular features and specificities of the Cuban economy.
El régimen impositivo para la microempresa en Cuba
Apenas legalizado el sector, en 1993, el gobierno de Cuba estableció un régimen impositivo para la microempresa. Fue diseñado para funcionar en un contexto difícil, caracterizado por la inexistencia de una cultura tributaria que hacía temer un incumplimiento generalizado y en él eran muy elevados los ingresos de algunos microempresarios. El régimen impositivo incluye pagos anticipados de cuota fija, un monto máximo de un 10% deducible de los ingresos totales como costos para el cálculo de la renta imponible, y una escala de impuestos progresiva. Sus muchas debilidades lo hacen injusto, ineficiente e ineficaz para la generación de recursos fiscales. El análisis que se efectúa en este trabajo indica que la incidencia real del impuesto es mayor que la escala tributaria oficial cuando los costos efectivos de producción superan el máximo deducible permitido del 10% (en algunos casos hasta 100% más). Los pagos de cuota fija se traducen en tasas impositivas marginales de 100% para los primeros niveles de ingreso, seguidas por una tasa de 0% hasta alcanzar el nivel de renta imponible en que los impuestos devengados según la escala se igualan al pago de cuota fija inicial. El régimen impositivo discrimina contra las microempresas con costos de insumos superiores al 10% de sus ingresos brutos. Es regresivo porque, hasta un nivel bastante significativo de ingresos netos efectivos, las microempresas con menores ingresos están afectas a tasas más altas. El sector de la microempresa enfrenta un régimen más gravoso que el que se le aplica al sector económico de empresas extranjeras y de sociedades de participación. Desde la perspectiva de la eficiencia en el uso de los recursos, el régimen impositivo restringe el ingreso de empresas nuevas al sector y empuja a algunas al cierre o a la clandestinidad, con lo que eleva los precios y reduce la producción, el empleo y la generación de ingresos. Por último, en la medida en que se abren menos negocios o las empresas pasan a la clandestinidad, quiebran o evaden impuestos, el gobierno pierde recaudación fiscal. Aquí se sugieren diversas modificaciones al régimen impositivo para superar estas debilidades. Estos cambios redundarían para Cuba en una mejor contribución del sector en materia de generación de empleo e ingresos, aumento de la producción a costos reales, precios más bajos y una mayor recaudación tributaria.
Problemas sociales y económicos en Cuba durante la crisis y la recuperación
Hasta 1989, la política social en Cuba logró avances muy notables en educación, salud, seguridad social, empleo y distribución. El colapso del campo socialista y otros factores internos y externos provocaron una severa crisis que tocó fondo en 1993 y deterioró casi todos los indicadores sociales. Las modestas reformas orientadas al mercado en 1993-1996 lograron una recuperación parcial, pero luego se paralizaron y se han revertido a partir del 2003. Los indicadores sociales mejoraron después de 1994, pero en 2003 varios de ellos no recuperaban aún el nivel de 1989 y la pobreza y la desigualdad habían aumentado. Este artículo evalúa la evolución económica y en especial la evolución social de Cuba en 1989-2004, basándose en estadísticas y publicaciones cubanas, así como en documentos de la CEPAL y en un trabajo reciente sobre aspectos económicos y sociales en 1997-2002, publicado conjuntamente por la CEPAL, el Instituto Nacional de Investigaciones Económicas de Cuba y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Relación comercio-crecimiento en Cuba: Estimación con el filtro de Kalman
En este artículo se realiza una estimación, con coeficientes que cambian en el tiempo, del “modelo de crecimiento económico con restricción de balanza de pagos” para Cuba. Se estima que las exportaciones han sido un factor determinante en la recuperación después de la crisis. Igualmente se estima un aumento de la elasticidadingreso de la demanda de importaciones a principio de los años 1990 y desde el 2003 al 2005, lo que indica que se ha retrocedido en la sustitución de importaciones. Se concluye que, dado el dinamismo de la exportación de servicios, existen ahora mejores perspectivas de crecimiento de la economía cubana; sin embargo, estas pudieran ser superiores y beneficiar a una mayor proporción de la economía si también se avanzara en la sustitución eficiente de importaciones y en la expansión de otros sectores exportadores con mayor efecto multiplicador.
El problema de la deuda de Cuba en monedas convertibles
Durante el decenio de 1980, se ha agravado el problema del endeudamiento de Cuba en monedas convertibles y en el marco de su participación en la economía mundial. Antes de 1985, el problema aparentaba ser manejable, y en realidad no parecía perjudicar gravemente el crecimiento macroeconómico cubano, que f ue vigoroso entre 1981 y 1985, mientras en la mayoría de los otros países deudores en desarrollo se producía una profunda contracción económica.
Determinantes y restricciones estructurales del crecimiento económico en Cuba
El presente trabajo representa un intento de explicar el crecimiento del sector productivo cubano e identificar sus principales determinantes y restricciones, en un período en que las mayores restricciones comerciales y financieras obligaron al país a reorientar su modelo económico y su patrón de inserción en la economía mundial. En el análisis se incorpora la dimensión institucional en la explicación del producto interno bruto (PIB), condicionando la selección del modelo, las variables y la metodología utilizada a las particularidades y especificidades de la realidad económica cubana.
La dualidad del tipo de cambio en la economía cubana de los noventa
En los años noventa se ha agudizado en la economía cubana la brecha entre el sector socialista tradicional regido por el peso y el sector internacionalizado, dolarizado y orientado al mercado. Esta división obedece, entre otras circunstancias, a la expansión del turismo y de las empresas extranjeras y mixtas; la contracción de la economía socialista y la pérdida de confianza en ella; el debilitamiento del peso por la acelerada inflación debida a las emisiones monetarias para financiar el déficit fiscal, y la sobrevaluación del tipo de cambio. La coexistencia de dos monedas y la bifurcación estructural se han reflejado en la distribución del ingreso y han influido en el comportamiento económico de la población. Los cubanos que tienen acceso a dólares en el sector internacionalizado ganan más que el resto de la población, por la diferencia entre el tipo de cambio paralelo y el oficial (comercial). Así, quienes desempeñan funciones sociales valiosas en el sector socialista de la economía reciben una menguada remuneración, mientras aquellos integrados al sector internacionalizado tienen ingresos relativamente adecuados. Esto hace que los cubanos procuren conseguir dólares por medios legales, semilegales o ilegales. Esta situación ha hecho resurgir problemas sociales que casi habían desaparecido a comienzos de los años sesenta. Ultimamente se ha logrado reducir el tipo de cambio paralelo y atenuar la bifurcación, gracias a ciertos cambios institucionales y la adopción de algunas políticas, sobre todo las de carácter fiscal que comenzaron a aplicarse en 1994. Se ha podido disminuir el déficit, desacelerar la emisión monetaria y controlar la inflación del peso, lo que incrementó la demanda de esa moneda. Pero habrá que seguir profundizando este proceso de cambios para reunificar la economía, mediante medidas de política cambiaría, la mayor liberalización de la pequeña y mediana empresa y la desregulación de los precios. Esto último obligará también a reestructurar el sistema de seguridad social.
La economía de Cuba
A fines de los años cincuenta, Cuba presentaba una estructura económica con marcados rezagos tecnológicos e insuficiente desarrollo industrial. El dinamismo de la producción y las inversiones era bajo, en tamo que la distribución del ingreso revelaba sesgos concentradores marcados. Durante el periodo 1959-1989 el producto aumentó a una tasa media anual aproximada de 4% y la política económica asignó al Estado un papel relevante en la producción de bienes y servicios, con marcado predominio de la planificación sobre los mecanismos del mercado en la regulación de la actividad económica. En esa etapa, la economía experimentó trascendentes modificaciones de sus bases productivas, aun cuando repitió muchas de las deficiencias comunes de los países socialistas: sobredimensio-namiento de proyectos, incorporación de tecnologías atrasadas y descuido de la compctitividad. Así, durante tres décadas Cuba se mantuvo al margen de las enormes transformaciones que se sucedían en los mercados de Occidente. Al amparo de los arreglos con los países socialistas, el país contó con mercados seguros para sus exportaciones, una relación de intercambio favorable (algo menos en los años ochenta) y un generoso financiamiento de la balanza de pagos. Con incficiencias notorias. se incrementó el acervo de bienes de capital y se expandió la infraestructura física; se amplió la capacidad de embalses de agua, se modernizó la red ferroviaria y se construyeron autopistas, carreteras y caminos rurales. Se avanzó en la electrificación del país. Se realizaron fuertes inversiones en desarrollo de recursos humanos, particularmente en los sectores de salud, educación, cultura y deporte. El elevado contenido social de la política económica permitió avances sustanciales en los servicios básicos a la población, así como la formación de recursos laborales con calificaciones crecientes.
Social and economic problems in Cuba during the crisis and subsequent recovery
Up to 1989, social policy in Cuba achieved very notable advances in education, health, social security, employment and income distribution. The collapse of the socialist bloc and other internal and external factors, however, gave rise to a severe crisis, which reached its bottom in 1993 and led to a deterioration in almost all the social indicators. The modest market-oriented reforms introduced in 1993-1996 generated a partial recovery but were later interrupted and have been reversed since 2003. The social indicators improved after 1994, but in 2003 some of them had still not regained their 1989 levels and poverty and inequality had increased. This article evaluates the economic and especially the social evolution of Cuba between 1989 and 2004, on the basis of Cuban statistics and publications, ECLAC documents, and a recent study of economic and social aspects in 1997-2002 jointly published by ECLAC, the National Economic Research Institute of Cuba, and the United Nations Development Programme.
Esteban montejo, relato del último esclavo cimarrón de cuba
A principios de los años 60, el escritor y etnólogo cubano Miguel Barnet recogió el testimonio de un afrodescendiente de 104 años, Esteban Montejo. Documento único sobre la condición de los cautivos y las violencias del sistema esclavista, el relato que escribió a partir de aquellos encuentros tuvo una repercusión inmensa.
Esteban montejo, récit du dernier esclave cimarron de cuba
Au début des années 1960, l’écrivain et ethnologue cubain Miguel Barnet recueille le témoignage d’un afrodescendant de 104 ans, Esteban Montejo. Document unique sur la condition des captifs et les violences du système esclavagiste, le récit qu’il en a tiré a connu un immense retentissement.
Esteban montejo, the story of Cuba’s last cimarrón slave
In the early 1960s, Cuban writer and ethnologist Miguel Barnet collected the testimony of 104-year-old Afro-descendant Esteban Montejo. The hugely influential account he drew up is a unique document on the condition of captives and the violence of the slavery system.
إستيبان مولللخو، قحفة آخز العبيد الغازين (سيميزون)) في كوبا
في بداية الستينيات، قام الكاتب وعالم الأعراق الكوبي ميغيل بارنيت بجمع شهادة إستيبان مونتيخو، المعمّر من أصل أفريقي والبالغ من العمر 104 سنة، فكانت النتيجة الحصول على وثيقة فريدة من نوعها عن حالة الأسرى والعنف التي اتّسم به نظام الرقّ، وقد حظيت هذه السردية التي استمدّها من تلك الشهادة بصدى هائل.
No. 32657. Royaume-Uni de Grande-Bretagne et d’Irlande du Nord et Cuba
Accord pour la promotion et la protection des investissements. Signé à Londres le 30 janvier 1995
